Luego de nueve días de viaje, siete tucumanos del Club de Montañistas Tucumán hicieron cumbre en el volcán Llullaillaco. En su aventura, recorrieron los mismos caminos que hacía el pueblo inca, así que pudieron ver algunos vestigios de su poderío. Algunas postales.
DESCANSO. Para llegar a la cumbre (a 6.700 metros) tuvieron que parar en tres campamentos de altura, para aclimatarse y para recargar energía. Fotos gentileza Juan Pablo Barilari
VESTIGIOS. Los deportistas recorrieron los restos de dos chozas incas, utilizadas para preparar a los niños antes de sacrificarlos.
PARTES. El grupo llegó arriba dividido en dos y con minutos de diferencia.